Baguettes en Horno Emile Henry

Ya tenía ganas de tener este horno para hacer baguettes. Me gustan muchísimo pero en los últimos años no encuentro las buenas, las auténticas baguettes crujientes y que duraban así tres días al menos. Ahora las llevas a casa y en el camino ya se han quedado fofas y solo valen para sopa de ajo. Así que, como ya le he pillado el truco a las hogazas he decidido empezar con las baguettes, para ello, ahorrar para comprar el horno y después a practicar hasta que salgan bien. No he tenido que esperar mucho para esto porque la receta con la que dí, retocando algunos detalles que no me gustaban, es espectacular, salieron crujientes, doradas y con una miga buenísima. Es muy sencilla, espero que la hagáis y os guste tanto como a mí.   
                                                                                      

INGREDIENTES
400 gr de harina panadera El Amasadero
240 gr de agua
10 gr de levadura fresca 
8 gr de sal marina fina

ELABORACIÓN
  • En un vaso diluimos la levadura en 100 gr de agua templada, no más de 30º y lo tapamos mientras empezamos a trabajar con el resto de agua y harina.
  • En un bol echamos la harina y vamos añadiendo el agua poco a poco y amasando con la mano. 
  • Añadimos el gua con la levadura diluida y mezclamos con el resto ya amasado.
  • Por lo último la sal y volvemos a amasar. 
                                              


  • Ya mezclado todo lo dejamos reposar en el bol, lo tapamos y esperamos 30'.                                                                                   


  • La masa ya debe haber absorbido casi todo el agua y, en el mismo bol, estiramos con las manos tirando de ella para arriba y doblamos en el centro. A esto se le llama plegado y lo hacemos tres veces seguidas por cada lado de la masa.   



  • Volvemos a tapar y dejamos otros 30' que vuelva a reposar. 


  • Pasado este tiempo ya debe estar la masa fina y suave. Entonces la volvemos a plegar sobre ella misma y le damos forma redondeada, dejando de nuevo reposar ahora ya hasta que doble de volumen a temperatura ambiente, que puede ser un par de horas, dependiendo de cada cocina.  


  • Pasadas las horas para que doble el volumen de la masa echamos algo de harina y  la extendemos sobre la encimera y, sin amasar, estiramos con las manos sacando el aire.  


  • Cortamos la masa en cuatro partes que sean más o menos de igual peso.


  • Le damos forma alargada, sin amasar, ya podemos ir cerrando en bola cada parte. Cuando veamos que la masa está firme empezamos a amasar ligeramente, solo alargando el trozo de masa, hasta conseguir el largo deseado para las baguettes, que es de 35 a 40 cm cada una.  


  • Colocamos unos lienzos de algodón y le echamos un poco de harina para que no se peguen las piezas. Vamos colocando de una en una y entre ellas hacemos una pequeña montañita con el lienzo para separarlas y que al fermentar no se peguen perdiendo así la forma. 


  • Una vez colocadas se esparce harina sobre ellas y las tapamos con otro lienzo. Así las podemos dejar levar a temperatura ambiente durante varias horas o en el frigorífico para que leven más despacio. Si es así tendrán que estar un mínimo de ocho horas. Yo las dejé fuera y en tres horas levaron lo suficiente.  


  • Como quiero que me dure mucho el horno de E.H. lo estoy tratando como niño pequeño, mimándolo lo más posible, puse papel de horno haciendo una curvita entre hueco y hueco y le puse un poco de harina, coloqué la masa de las baguettes espolvoreándola con harina y colocándole la tapadera. Mientras, se precalienta el horno a 250º durante media hora. 

  • Pasado este tiempo se greñan las baguettes con un corte fino de arriba abajo y se tapa de nuevo para introducirlo en el horno ya caliente. Con un spray mojamos ligeramente el interior para crear un poco de vapor. Cerramos el horno y lo dejamos 25'. Pasado este tiempo destapamos el molde y dejamos que se doren un poco más, de 3 a 5'.       
                                                                         

  • Aquí tenemos el resultado. Buenísimas. 




Deliciosas, tiernas y, aunque duraron muy poco tiempo, se mantuvieron muy esponjosas hasta acabarlas. Espero que os guste.  
                                 

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